La Orientación Sexual

LA ORIENTACIÓN SEXUAL

¿Qué es la orientación sexual? Es simplemente el sentimiento de atracción que tienen los sentimientos humanos hacia otros.

La orientación sexual, además, es uno de los tres elementos que componen la identidad sexual de una persona. Los otros dos son la identidad de género y el rol de género.

Estamos acostumbrado a tres tipos de orientación sexual: heterosexual, homosexual y bisexual.

Estos tres tipos son los aceptados oficialmente en los entornos científicos. Sin embargo, hay un problema: sólo clasifican por el sexo de las personas; no tienen en cuenta los sentimientos. Es algo así como decir: "me gusta porque eres hombre" o "me gusta porque eres mujer".

Muchas personas no se sienten identificadas dentro de esos tres tipos. Como dije, éstos tienen en cuenta sólo el sexo de las personas y no sus emociones o situación subjetiva.

Es por esta razón que se han creado otros tipos de orientación sexual que intentan grosso modo clasificar y adaptarse a todas las personas. 

Aquí están los otros tipos:

Demisexualidad

La demisexualidad se describe como la aparición de atracción sexual solo en algunos casos en los que previamente se ha establecido un fuerte vínculo emocional o íntimo.

Lithsexualidad

Las personas con este tipo de orientación sexual experimentan atracción hacia otras personas, pero no sienten la necesidad de ser correspondidas.

Autosexualidad

En la autosexualidad, la atracción se experimenta hacia uno mismo, sin que esto tenga que ser sinónimo de narcisismo. Puede entenderse como una forma de alimentar afecto o amor propio.

Antrosexualidad

Este concepto sirve para que puedan identificarse con él las personas que experimentan su sexualidad sin saber en qué categoría identificarse y/o sin sentir la necesidad de clasificarse en ninguna de ellas.

Asexualidad

La asexualidad sirve para poner nombre a la falta de atracción sexual. Muchas veces se considera que no forma parte de la diversidad de orientaciones sexuales, al ser su negación. 

Pansexualidad

Atracción sexual hacia algunas personas, independientemente de su sexo biológico o identidad de género. La diferencia entre la pansexualidad y la bisexualidad es que en el segundo caso la atracción sexual se sigue experimentando a través de las categorías de género, mientras que en la pansexualidad no ocurre esto.

Hay que mencionar que estos tipos son meramente orientativos, y que de vez en cuando suelen salir a la luz más clasificaciones. 

Como conclusión, Iván y yo compartimos la opinión de que etiquetar es limitar. El espectro de las emociones, así como del deseo humano es muy amplío como para insertarlo en unas clasificaciones. 

Por lo tanto, a la hora de elegir lo que nos gusta, deberíamos seguir lo que sentimos y comprendernos a nosotros mismos según nuestros instintos, dejando de lado todo lo demás.