Ahora, comenzaremos a hablar sobre los problemas en las relaciones sexuales en las mujeres, donde procedemos a hablar sobre: La falta de deseo sexual, incapacidad de lograr excitación o clímax y
Comenzando con la falta de deseo sexual, es un bajo nivel de interés en las relaciones sexuales, en la que el afectado no responde al deseo de actividad sexual de la pareja.
Orgánicas: Psicológicas:
-Tratamientos con algunos medicamentos. -Ansiedad y estrés
-Alteraciones hormonales -Cansancio
-Enfermedades metabólicas -Monotonía
-Enfermedades crónicas -Vida sexual poco satisfactoria.
Siguiendo con la incapacidad de lograr excitación o clímax sexual , el orgasmo es la culminación del placer sexual. Es una explosión de sensaciones muy placenteras, así como la liberación de la tensión acumulada durante la práctica sexual que se esté realizando.
Entre las causas encontramos:
-Quienes experimentan mucha culpa. A decir del especialista, se ha creado una escala social de valores con base en la idea de que el placer es negativo y de que existen mujeres “malas” y “buenas”; las primeras son las que expresan abiertamente su deseo a tener relaciones y que se masturban; en cambio, las segundas deben “tener clase” y, como no pueden abordar abiertamente su sexualidad ni estimulan su cuerpo, bloquean la sensualidad.
-Aquellas con temor a perder el control. Aunque pueden tener relaciones con cierta normalidad, desconocen su cuerpo y dejan que sea el hombre quien lleve la iniciativa; sin embargo, cuando sienten que puede llegar el clímax, bloquean sus sensaciones, frenan el estímulo y desvían sus pensamientos, ya que no desean caer en descontrol de sus emociones y pensamientos.
-Mujeres que vivieron situaciones de abuso sexual durante la infancia. Al no comprender o interpretar lo sucedido, la niña crece con pensamientos confusos y esto se traduce, durante la edad adulta, en miedo a entregarse. Es posible alcanzar cierto grado de excitación, pero no se presenta el clímax.
Por último entramos, las relaciones dolorosas.
Entre las causas encontramos, la dispareunia puede ser debida a factores anatómicos, a trastornos locales, o a factores psicológicos.
En la mayoría de los casos, estos factores van a determinar diferentes tipos de dolor.
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